7.- Lo que el Alma de Dios, El Padre, te manda hacer.
En algunas de las enseñanzas pasadas, hemos hablado de Dirbán, el primer sabio de la tradición, quien demostró ser un Tiglanzih (dispuesto sin necesidad) al haber dejado sus lujos, comodidades y riquezas en pos de seguir la Voluntad Divina (Yazdjred). Ahora es tiempo de extendernos un poco más acerca de la vida de este siervo de Dios muy notable: Dirbán nació en un pueblo llamado Ganzak, como hijo del patriarca de dicha aldea. Sin embargo los aldeanos fueron manipulados por el corrupto sacerdote de Ganzak, por lo que lincharon al padre de Dirbán, y a el lo expulsaron. Fue así como Dirbán, siendo apenas un niño entrando a la adolescencia, tuvo que arreglárselas solo, tratando de sobrevivir en el campo. Entonces dio con una caravana Aramiyeh que pasaba cerca de allí, la cual era propiedad de uno de los hombres más ricos de aquella época. Así es como Dirbán se unió a la caravana ayudando al rico mercader, y como este millonario se dio cuenta de que Dirbán sabía habl